Situado en el edificio del Centro Social de la Casa «El Cisco», en la Avenida de la Constitución, 42, la instalación alberga una sala de etnología y otra de arqueología. La primera está dividida en cuatro ambientes: el trigo, el aceite, el vino y la vida cotidiana. La segunda dispone de piezas procedentes de las diversas excavaciones que se han realizado en el término municipal y cesiones de particulares.
La apertura al público supuso un trabajo previo de varios años donde colaboraron profesores de algunos centros de enseñanza y sus alumnos. Fruto de ese trabajo, la Conselleria de Cultura reconoció a la instalación como Colección Museográfica permanente en 1996. En diciembre de 1998 abrió sus puertas al público con horario estable, mientras que en 2000 la Conselleria de Cultura lo declaró Museo.