La Conselleria ha dejado de realizar un servicio que ahora asume el consistorio para el que destina 8.000 euros.

El Ayuntamiento de Aspe, a través de las Concejalías de Sanidad y Medio Ambiente, en colaboración con el área de Servicios, ha iniciado una campaña para realizar un tratamiento para controlar la procesionaria en los pinos de las zonas más cercanas al casco urbano.

Según explican los ediles de Izquierda Unida, responsables de los departamentos de Sanidad y Medio Ambiente, Carmen Soria y Chema García Payá, “la aplicación del tratamiento se efectúa en cuatro fases: de junio a septiembre, instalamos trampas de feromonas. De esta manera se intenta capturar el máximo número de adultos, evitando el apareamiento, y se puede tener una idea aproximada de la posible población de procesionaria; de septiembre a octubre, se llevará a cabo un tratamiento de los propios árboles afectados con una pulverización localizada. Y de noviembre a diciembre, se procederá a la retirada de las bolsas que se hayan formado en los pinos. El tratamiento finalizará entre febrero y marzo de 2015 con una nueva pulverización localizada”.

Las concejalías de Sanidad y Medio Ambiente han estado varios meses preparando estas actuaciones y para poder llevar a cabo toda la campaña la dotación económica asciende a 8.000 euros.

Soria y García recuerdan que “tradicionalmente era la Conselleria la encargada de controlar la procesionaria de nuestros pinos, pero ahora tenemos que ser los ayuntamientos los encargados de organizar y sufragar los gastos de este tratamiento”.