La concejalía de Medio Ambiente y Servicios Municipales ha adelantado este año la poda del arbolado público para responder adecuadamente a las demandas de los vecinos. En este sentido, se ha iniciado la poda por las moreras, que se sitúan en las aceras y llegan a las ventanas de los primeros pisos. Se continuará con el resto del arbolado que, en algunos casos, impide la correcta iluminación de la vía pública.
La poda en Aspe finalizará en el mes de diciembre.
Los trabajos de poda en el arbolado son necesarios para evitar la rotura de ramas. Además, la poda facilita que el aire y la luz penetren por toda la estructura del árbol, ayudando así a que se realice el proceso de fotosíntesis y la planta esté más sana. Mejora el aspecto general del árbol, evitando que el crecimiento lo haga lucir desordenado y reducir las posibilidades de ser afectado por enfermedades.
Los beneficios para el conjunto de la población también son numerosos. Los árboles producen oxígeno, purifican el aire, forman suelos fértiles, evitan la erosión, mantienen ríos limpios, captan agua para los acuíferos, sirven como refugios para la fauna, reducen la temperatura del suelo, propician el establecimiento de otras especies, regeneran los nutrientes del suelo y mejoran el paisaje.