Anoche, el municipio de Aspe vivió un momento cargado de simbolismo con la inauguración del nuevo castillo de la Embajada, un elemento clave en las tradicionales fiestas de Moros y Cristianos.
Tras dos décadas de servicio, el anterior castillo —construido por la Escuela Taller bajo la dirección de Vicente Pujalte— ha cedido su lugar a una nueva infraestructura, más moderna y adaptada a los actuales estándares de seguridad. El castillo anterior fue escenario de innumerables noches memorables y formó parte del imaginario colectivo de generaciones de aspenses.
El nuevo castillo municipal, ya instalado en su ubicación habitual del Parque Dr. Calatayud, está diseñado como una infraestructura modular, de fácil montaje y polifuncional, pensada para servir a las necesidades del municipio más allá de las propias fiestas. Ha sido proyectado por el arquitecto Ramón Eliseo Gómez Martínez y ejecutado por Eusebio Miñarro, de Construcciones Modulares Miñarro.
Durante el acto inaugural, el alcalde de Aspe, Antonio Puerto, quiso poner en valor la evolución de la fiesta y cómo han crecido las comparsas en los últimos años, destacando que «este nuevo castillo es reflejo del esfuerzo colectivo por mantener viva la tradición, al tiempo que adaptamos nuestras infraestructuras a los nuevos tiempos y necesidades de seguridad».