La atención que se ofrece con la colaboración del Colegio de Abogados de Alicante permite buscar soluciones ante las entidades bancarias que reclaman el pago de las hipotecas.
La Oficina Antidesahucios del Ayuntamiento de Aspe ha atendido a un total de 60 familias afectadas por la reclamación de la hipoteca por parte de las distintas entidades bancarias durante el pasado 2013, según informó hoy Manuel Díez, responsable de esta iniciativa desde finales de 2012. La colaboración con el Colegio de Abogados de Alicante y los recursos del Ayuntamiento de Aspe han permitido cubrir las necesidades de muchas familias que sufrían la presión de la deuda bancaria.
Este recurso, puesto en marcha a finales de 2012, ha permitido abrir una interlocución entre los afectados y los responsables bancarios, barajando todas las posibilidades de solución. “No se ha descartado ninguna de las opciones desde el establecimiento de un periodo de carencia de la deuda hasta la dación en pago, en función de las condiciones familiares, el nivel de deuda y los intereses de los afectados”, comentó Díez.
El impulsor de esta oficina, hoy portavoz del Grupo Municipal Socialista, señaló igualmente que. además de la puesta en marcha de la entidad de apoyo, se ha establecido para este año una partida concreta para el pago de las plusvalías, que cargaba sobre las familias incluso cuando habían perdido su vivienda por impagos de sus cuotas hipotecarias.
Para Díez, “el desarrollo de esta iniciativa ha sido positiva, aunque en muchos casos los resultados – desgraciadamente – suelen ser dramáticos. Estamos hablando de que muchas familias pierden su vivienda, pero uno de nuestros objetivos es evitar un castigo de por vida, es decir, que estas mismas familias continúen soportando una deuda millonaria a pesar de haber perdido su casa”. No obstante, a su juicio, “estamos razonablemente satisfechos, aunque el objetivo del Ayuntamiento, de toda la Corporación, debe ser que nadie vuelva a utilizar los servicios de esta oficina”.
El socialista recordó que la Oficina Antidesahucios fue una de las primeras que se crearon en la provincia de Alicante, tras asumir el protocolo diseñado para evitar que las familias pierdan sus casas y, en el peor de los casos, que vivan sometidas a una deuda de por vida. Se diseñó, según comentó, para buscar soluciones como la moratoria en los pagos, la dación en pago de la vivienda, o la búsqueda de soluciones como el alquiler social.
Al inicio del funcionamiento de la Oficina, el propio Manuel Díez, realizó gestiones directamente con los agentes involucrados en los casos de desahucios, principalmente con entidades bancarias.